Nos adentramos en la calle Don Jaime, en pleno centro de Zaragoza. Para presentaros Marisquería Tony.
El objetivo principal de la reforma era dar al establecimiento un aire diferente y renovador, dotándolo de luminosidad y aportándole sensación de mayor amplitud, manteniendo la propia esencia de su producto.
Para ello nos sumergimos en el mar, como si de un cuento se tratase creamos dos personajes. Un pez martillo y un pequeño tiburón que nadan en la barra forrada con madera simulando las escamas de un pez, dando textura y calidez. En las que se distribuyeron pequeños colgadores metálicos imitando colas de pez zambulléndose en el mar.
El mar como el elemento principal de una reforma integral
Los mismos personajes aparecen reflejados en la pared de enfrente, construyendo unos grandes apliques con luz ambiental. Todo ello realizado en madera, alegoría a los barcos que por sus aguas navegan. Piezas de diseño icónico distribuidas por todo el establecimiento como los cuadros realizados con maderas y ostras, o la lámpara que nos encontremos al bajar por la escalera. Para dar sensación de continuidad a toda la decoración.
Como contraposición encontraremos también un gran elemento decorativo de metal, generando moviendo en el espacio, mapas del mundo con enmarcaciones artesanas realizadas con tablas. Para dar un toque divertido de color se distribuyeron grandes impresiones mosaicas. Como componente afectivo de los dueños se mantuvieron dos cuadros de nudos marineros, que restauramos para ser integrados en la decoración.
Una lámpara en forma de ola cobra protagonismo
El elemento principal de la composición gira en torno a la grandiosa lámpara de tres metros de largo con forma de ola que baña de luminosidad el espacio, dibujando un espectacular juego de luces y sombras y brillos nácar. Lámpara diseñada y confeccionada artesanalmente, al igual que la mayoría de los objetos decorativos por Garno Estudio. Su temática, las ostras, esencial para el establecimiento, ya que es la especialidad de la casa, consideradas uno de los mariscos más apreciados.
Otros puntos de luz cuelgan del techo colocados en meticulosa simetría, aportando orden y armonía, sin descuidar el detalle marino, metáfora a las redes de los marineros. El toque industrial y modernizado, lo proporciona su composición metálica con bombillas de filamentos.
Para la comodidad de los clientes se dispusieron tres mesas altas realizadas para la ocasión en madera y hierro. Acompañando a dos ménsulas originarias. Al igual que éstas aprovechamos parte del mobiliario original así como mesas y taburetes. Para su restauración se eligió una paleta cromática, entre frío y cálido, para facilitar al cliente situarse en la atmósfera creada.
Se concibió como tonalidad unitaria para todo el espacio, paredes, fachada, mobiliario, elementos decorativos, suelos, vigas…, dotándola de pequeños matices. Como contraste se eligieron unas sillas de madera y hierro oscuro dándole solidez al espacio. Formando un equilibrio cromático perfecto.
Cuerdas entrelazadas separan la zona de la barra con el comedor que a su vez indican la bajada a los servicios. Creamos un gran marco de madera tejido con cuerdas a mano. Dicha escalera se forró con un papel marinero que nos lleva a los camerinos del barco. Allí nos recibe un singular mueble creado por dos medias lunas de barril, reciclados del propio establecimiento, sobre los que reposa un gran espejo de los años cincuenta. Conjunto iluminado por una preciosa lámpara de cuero y ostras. A modo de camerinos se restauraron los lavabos originales.
Una reforma original donde cada elemento, cada revestimiento y cada detalle se ha elegido con sumo cuidado, con el fin de obtener una agradable estancia con un equilibrio cromático impecable. No dudéis sumergiros en este magnifico lugar donde la vista y el gusto son exquisitos. Marisquería Tony.
Si estás buscando reformar tu negocio, no dudes en ponerte en contacto con nosotras. Estaremos encantadas de conocer más acerca de tu proyecto.